¿Cuándo buscar la ayuda de un psicólogo?

María Lourdes Cáceres
Psicólogo y Psicoterapeuta
CPsPn°31996

¿Cuándo buscar la ayuda de un profesional de la salud mental?

Beneficios de la psicoterapia

Para muchas personas, ir al psicólogo es sinónimo de ser una persona débil. Acudir al psicólogo es a veces poco valorado ya que existe un prejuicio al respecto. Se escucha con frecuencia que “sólo los locos van al psicólogo”. Y no hay nada más alejado de la realidad.

¿Cuándo y por qué buscar la ayuda de un psicólogo?

Buscar la ayuda de un psicólogo te puede servir para transformarte en una persona más segura de ti misma, con herramientas propias para afrontar diversas dificultades y adaptarse a situaciones complicadas.

Se necesita valentía para reconocer que necesitamos ayuda para resolver algunos temas porque a veces, nuestro propio repertorio de acciones sólo perpetúa el problema. Evitar enfrentar la realidad no ayudará en nada porque sólo nos mantiene en el sufrimiento. Tomar la decisión de empezar una terapia es un buen primer paso para iniciar la transformación.

Asistir a psicoterapia no es para esperar pasivamente a que el psicólogo solucione tus problemas, es una decisión personal y requiere una actitud, voluntad y compromiso para aprender a aceptar algunas realidades, adaptarse y cambiar aquello que nos hace daño.

¿Cuándo buscar la ayuda de un psicólogo?

1.No funciona lo que has estado haciendo hasta el momento.
Cuando experimentas problemas de ansiedad que se mantienen durante meses o años. Sentimientos de tristeza profunda sin que puedan superarlo. Dificultades en las relaciones personales, en el trabajo. Si hasta la fecha has tratado de hacer cosas para cambiar una situación y no lo has logrado, es momento de pedir ayuda.


2.Cuentas tus problemas a tus amigos y familiares
Has buscado consuelo en tus amigos y familiares contándoles todas tus situaciones difíciles y te han dado consejos pero tú sigues haciendo lo mismo y culpas a todos por tus problemas. Alguna vez te han dicho cosas que te han molestado y probablemente hasta te has sentido juzgado.


3.Utilizas sustancias para aliviar los problemas
El uso del alcohol se vuelve más frecuente como un escape a los problemas debido a un estado de ánimo negativo. Puedes recurrir a sustancias psicoactivas para sentirte mejor. A la larga, esto se puede convertir en una dependencia y traerte muchos problemas.


4.Tu entorno cercano se siente preocupadas por tí
Algunas personas te han dicho que están preocupados por ti, que has cambiado y no precisamente para bien, te ven mal y también te sientes mal.


5.Todo lo piensas en negativo
Todo lo que te sucede en la vida lo interpretas como algo negativo. No logras encontrar cosas positivas. Te embarga el sentimiento que todo lo hagas resultará una catástrofe y entonces, ya no quieres intentar nada.

6.Te sientes irritable y agresivo. Estás en una guerra interna permanente contra ti y contra todos los que te rodean. Sientes que todos quieren hacerte daño, o están conspirando contra ti, que te maltratan, que te juzgan y no te entienden, por eso hiper reaccionas hiriendo a tus seres queridos. No puedes controlar tus impulsos y eso te generan problemas en tus relaciones y en tus actividades diarias.

7.Tus hábitos de sueño y alimentación han cambiado
No consigues dormir o duermes demasiado, no puedes descansar y eso afecta tu trabajo y tus actividades diarias. De igual manera, has perdido el apetito o de pronto sientes la necesidad irresistible de comer a todas horas. Son señales a las que hay que prestar atención. Tanto el descanso como la alimentación son las bases del bienestar y la salud.

8.No encuentras motivación en las cosas que haces
Has perdido el interés y ya no disfrutas las cosas que antes solían ser de tu agrado. Sientes que no hay nada que te motive, que no le encuentras gusto a nada, que te cuesta incluso levantarte de la cama cada mañana.

En estos casos, un psicoterapeuta, profesional de la salud mental, puede ayudarte. La psicoterapia está diseñada para que percibas beneficios, como por ejemplo.

La psicoterapia nos permite cambiar aquello que nos hace daño. ¿Cuándo buscar la ayuda de un psicólogo?
  1. Te ayudará a sentirte mejor
    Trabajar tus problemas con un psicoterapeuta te ayudará a liberar tus emociones, te sentirás aliviado al poder conversar con confianza, sin temor a ser juzgado. Expresar con libertar tus emociones y pensamientos, te permitirá sentirte mejor.
  2. Tendrás herramientas para solucionar problemas
    Aprenderás técnicas adaptativas para solucionar problemas. Podrás ver los problemas desde varios puntos de vista, promoviendo la flexibilidad psicológica para observar los conflictos desde afuera y encontrar una solución en todos los aspectos de la vida.
  3. Podrás cambiar las creencias que te limitan
    Actuamos según lo que pensamos, tenemos creencias y valores sobre las que organizamos nuestro modo de vivir. Las creencias nos ayudan pero también nos limitan ya que a veces nos pueden dar una visión más compleja de las situaciones. El psicólogo puede ayudarte a identificar, analizar y modificar tus creencias para hacer más sencilla tu vida.
  4. Podrás sentirte en paz contigo mismo y con los demás
    Al identificar tus propios problemas podrás superar problemas laborales, de pareja, de estudios, etc. Te ayudará a aprender a relacionarte con los demás promoviendo una comunicación asertiva y empática, generando bienestar contigo y los que te rodean.
  5. Sesiones confidenciales, empáticas y respetuosas
    Las sesiones de psicoterapia se desarrollan dentro de un ambiente de cordialidad, respeto y sobre todo confidencialidad. Lo que se conversa en consulta, se queda en la consulta. Por este motivo, puedes expresarte con tranquilidad y seguridad y podrás revelar todo aquello que te aqueja. El psicoterapeuta no está allí para juzgarte sino para ayudarte a transitar por la vida con herramientas que te serán de utilidad para encontrar tu bienestar.
  6. Finalmente, si sientes que quieres mejorar tu salud y encontrar equilibrio y bienestar en todos los aspectos de tu vida, busca la ayuda de un psicoterapeuta de confianza.