Las mujeres que no quieren reconstruirse el pecho<\/p>\n\n\n\n
Andrea Presedo<\/a>, periodista gallega<\/p>\n\n\n\n Ah\u00ed aparecieron Idoia <\/strong>y Teta & Teta con su maravilloso proyecto de un sujetador \u00abde una sola copa para mujeres de una sola teta\u00bb. Me pareci\u00f3 novedoso el hecho de que una mujer se planteara rechazar una reconstrucci\u00f3n<\/strong> de pecho. <\/p>\n\n\n\n Pero conforme fui profundizando en materia lo entend\u00ed. Es necesario escuchar a los m\u00e9dicos, pero tambi\u00e9n que ellos escuchen a las pacientes. La historia<\/a> de Idoia<\/strong> lo ejemplifica a la perfecci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n Idoa tras una mastectom\u00eda<\/strong> decidi\u00f3 no reconstruirse el pecho. <\/p>\n\n\n\nLas mujeres que no quieren reconstruirse el pecho.
Idoa decidi\u00f3 que no necesitaba un pecho para seguir sinti\u00e9ndose bonita. <\/em><\/h4>\n\n\n\n
El c\u00e1ncer<\/strong> de mama es una enfermedad que parece haber cobrado vida en las \u00faltimas d\u00e9cadas. Lo cierto es que hace ya mucho que existe, pero en la sombra. La tan potente investigaci\u00f3n m\u00e9dica en el campo ha permitido no solo ponerle nombre a la enfermedad, sino hacer visible tanto la patolog\u00eda como todas aquellas personas que la sufren. <\/p>\n\n\n\n
Un d\u00eda una paciente con c\u00e1ncer<\/strong> me dijo: \u00abPor favor, no escribas que somos enfermas de c\u00e1ncer, no le pertenecemos\u00bb. Me di cuenta en ese momento de la importancia de las palabras a la hora de informar sobre algo tan serio como esta dolencia oncol\u00f3gica. Precisamente eso me abri\u00f3 los ojos a prestar m\u00e1s atenci\u00f3n a lo que piden las pacientes, en lugar de quedarme \u00fanicamente con el discurso m\u00e9dico. <\/p>\n\n\n\n<\/h4>\n\n\n\n